Según el Instituto Nacional de Estadística, a día de hoy, viven en España casi 330.000 mujeres rumanas. La gran mayoría son inmigrantes que llegaron hace años buscando la oportunidad de una vida plena en este país, y que no sólo consiguieron trabajo, sino que emprendieron los suyos propios y, muchas, cumplieron además sus sueños más personales.
Su carácter es fruto directo o heredado de haber vivido una dictadura comunista: saben lo que es salir de la nada, partir de cero y conseguir sus objetivos con tenacidad y esfuerzo. Su motivación: una autoestima forjada a fuego desde niñas. Su motor: el amor inquebrantable por los suyos.
Las mujeres rumanas en España trabajan, sacan adelante a sus familias, son madres, emprenden, crean, y siempre desde la disciplina, el coraje, la constancia, la valentía. Nadie les ha regalado nada, por eso ellas se saben orgullosas de sus logros y lo muestran en sus miradas.
El objetivo en esta exposición es dar visibilidad a estas mujeres fuertes, poderosas e infinitamente bellas. Alejarlas de dañinos estereotipos y reconocer el valioso lugar que ocupan en nuestra sociedad.